¿Por qué Dios se hizo hombre?
La encarnación de Dios
Hay dos grandes acontecimientos que ocurrieron en la historia del universo. El primero de ellos fue la creación. Antes de la creación, no existía nada, sino únicamente Dios. Cuando vino el tiempo, Dios hizo que llegaran a existir todas las cosas. No obstante, Dios no formaba parte de ninguna de las cosas que había creado. Él no estaba en el sol ni en la luna, ni tampoco en los árboles ni en los animales. A pesar de que Él los creó, se encontraba fuera de ellos.
Sin embargo, con respecto al segundo gran acontecimiento, la historia cambia. Fue en la encarnación que Dios se hizo carne. La finalidad de la encarnación no era hacer que existiera el universo de la nada; más bien, era introducir a Dios en el hombre, quien ya existía.
La encarnación consiste en que Dios mismo, el Dios eterno, se hizo carne, es decir hombre. En Juan 1:14 dice: “El Verbo se hizo carne”¿Quién es el Verbo? Es Dios, el creador. (Juan 1:3) El Señor Jesús fue concebido por obra del Espíritu Santo. Debido a esto, el Espíritu llegó a ser la esencia divina de Su ser. Además, adquirió la esencia humana de parte de María, siendo constituido con estas dos naturalezas: la humana y la divina, llegando a ser un Dios-hombre. Esto significa que el Señor era tanto Dios como hombre, Dios completo y un hombre perfecto. (Mateo1:18-20)
Dios al hacerse semejante a nosotros, participó de nuestra misma
naturaleza y descendió a nuestro nivel. (Filipenses 2:5-11, Hebreos
2:14-18). Cristo en su humanidad, como Hijo del hombre, se sujetó al
Espíritu, sintió debilidades y fue tentado pero no pecó. Debido
a que todos nosotros somos débiles y frágiles en cuanto a la carne, Él
llegó a ser un hombre en la carne, según nuestra semejanza, pero sin
pecado, a fin ser misericordioso y compadecerse de nuestras debilidades
(Hebreos 4:15).
Aunque en su esencia en el Espíritu El era Dios, en su humanidad perfecta aún no lo era y esta debía de pasar por un proceso de muerte, resurrección y glorificación para lograr la divinización de su esencia humana. ¡¡Esto es muy significativo y profundo!!
La encarnación es un hecho aún más extraordinario que la creación, pues mediante ella, Dios en Cristo se hizo hombre. Como tal, llevó a cabo la obra redentora, al morir en la cruz por nuestros pecados. Luego, en Su resurrección, El introdujo Su humanidad en Dios. ¡Cuán maravilloso es este hecho! Dios se hizo hombre para darse a conocer de manera real, cumplir su
propósito en la tierra y se introdujo en la humanidad con el fin de
introducir a Dios en el hombre y el hombre en Dios, a fin de que sean uno.
¡Qué maravilla más grande es ésta que supera a la creación del universo!
Dios vino a su debido tiempo, cumpliendo más de 300 profecías y tipologías dadas en el antiguo testamento. (Gálatas 4:4, Romanos 5:6) Algunas Profecías destacadas sobre el nacimiento de Jesús en el Antiguo testamento:
Su divinidad: “Porque un niño nos es nacido” ”Y se llamará Dios Fuerte, Padre Eterno” (Isaías 9:6) “ Y llamará su nombre Emanuel” que significa Dios con nosotros”(Isaías 7:14) Lo concebirá una virgen. (Isaías 7:14). El lugar de nacimiento: “Belen” (Miqueas 5:1-2). Su descendencia: “del rey David” (Jeremías 33:15)