El hombre corporativo
¿Acaso usted se ha imaginado alguna vez que en todo el universo existen sólo dos hombres? Es probable que no, pero esto es un hecho a los ojos de Dios. Para Dios solamente existen dos hombres: Adán y Cristo. Nosotros estamos incluidos ya sea en el primer hombre o en el segundo.
Sólo existen dos hombres en el universo delante de Dios
Adán fue el primer hombre, según la imagen y semejanza de Dios Dios. Él no sólo fue el primer hombre, sino también el primer Adán. Cuando Adán fue creado por Dios, no tenía nada de la naturaleza divina ni de la vida de Dios. Él era simplemente la creación de Dios, la obra de Sus manos. En un principio Dios creó un Hombre y no un hijo de Dios. Por lo tanto todos los hombres son los descendientes de Adán y de los hijos de los hombres y no son hijos de Dios. (Juan 1:13) El hombre, aunque creado a la imagen y semejanza de Dios, aún necesitaba recibir la vida de divina dentro de él para llegar a ser un hijo de Dios, a fin de ser parte de la nueva creación, el nuevo Hombre.
Cristo es el segundo hombre y el postrer Adán. ¿Qué significa que Cristo sea el segundo hombre y el postrer Adán? Significa que Él es el último hombre. Después de Él, no hay un tercer hombre, porque el segundo es el último. El segundo hombre no fue creado por Dios. Al contrario, es un hombre mezclado con Dios. Él es Dios encarnado como hombre. El primer hombre no tenía nada de la naturaleza divina ni de la vida de Dios, porque él era meramente creación Suya. El segundo hombre es la mezcla de Dios con Su criatura y está lleno de la naturaleza divina y de la vida de Dios. Es un hombre mezclado con Dios, un Dios-hombre. La plenitud de la Deidad está corporificada en Él (Col. 2:9)
El hombre que Dios creó era un Hombre corporativo.
Dios no creó muchos hombres. El creó a la humanidad colectivamente en una sola persona representativa, Adán. El día que Adán fue creado, fuimos creados todos. Y en la caída de Adán caimos todos (Génesis 5:2) (Romanos 5:12) (1 Corintios 15:21-22) En la caída de este hombre corporativo Adán, pasó a ser la vieja creación, le llamamos vieja porque se introdujo en la naturaleza del hombre el pecado que contenía el elemento de la vejez que es la muerte. (2 Corintios 5:17)
Delante de Dios solo existen dos personas corporativas, las que están incluidas en Adán, la vieja creación, el viejo hombre y las que han sido introducidas en Cristo, que son la nueva creación, el nuevo Hombre. (Gálatas 6:15)
Fue por medio de la cruz que Cristo puso fin a la vieja creación y por medio de la cruz, en La resurrección se produjo el parto del nuevo Hombre corporativo, la nueva creación, el cual también obtuvo varias definiciones, en singular, tales como el cuerpo, la novia, la Esposa, la nueva Jerusalén.... (Efesios 2:15)
¿Quiénes forman este nuevo Hombre corporativo?
Los hombres que han recibido la vida de Dios, que han sido regenerados y que unidos por esa misma vida, les introduce y les hace participar del nuevo hombre, los cuales van a ser transformados la imagen de Cristo. La iglesia, La cabeza y el cuerpo de Cristo es el nuevo hombre (2 Corintios 3:8) (Romanos 8:29)
Cristo es el segundo hombre y el postrer Adán. ¿Qué significa que Cristo sea el segundo hombre y el postrer Adán? Significa que Él es el último hombre. Después de Él, no hay un tercer hombre, porque el segundo es el último. El segundo hombre no fue creado por Dios. Al contrario, es un hombre mezclado con Dios. Él es Dios encarnado como hombre. El primer hombre no tenía nada de la naturaleza divina ni de la vida de Dios, porque él era meramente creación Suya. El segundo hombre es la mezcla de Dios con Su criatura y está lleno de la naturaleza divina y de la vida de Dios. Es un hombre mezclado con Dios, un Dios-hombre. La plenitud de la Deidad está corporificada en Él (Col. 2:9)
El hombre que Dios creó era un Hombre corporativo.
Dios no creó muchos hombres. El creó a la humanidad colectivamente en una sola persona representativa, Adán. El día que Adán fue creado, fuimos creados todos. Y en la caída de Adán caimos todos (Génesis 5:2) (Romanos 5:12) (1 Corintios 15:21-22) En la caída de este hombre corporativo Adán, pasó a ser la vieja creación, le llamamos vieja porque se introdujo en la naturaleza del hombre el pecado que contenía el elemento de la vejez que es la muerte. (2 Corintios 5:17)
Delante de Dios solo existen dos personas corporativas, las que están incluidas en Adán, la vieja creación, el viejo hombre y las que han sido introducidas en Cristo, que son la nueva creación, el nuevo Hombre. (Gálatas 6:15)
Fue por medio de la cruz que Cristo puso fin a la vieja creación y por medio de la cruz, en La resurrección se produjo el parto del nuevo Hombre corporativo, la nueva creación, el cual también obtuvo varias definiciones, en singular, tales como el cuerpo, la novia, la Esposa, la nueva Jerusalén.... (Efesios 2:15)
¿Quiénes forman este nuevo Hombre corporativo?
Los hombres que han recibido la vida de Dios, que han sido regenerados y que unidos por esa misma vida, les introduce y les hace participar del nuevo hombre, los cuales van a ser transformados la imagen de Cristo. La iglesia, La cabeza y el cuerpo de Cristo es el nuevo hombre (2 Corintios 3:8) (Romanos 8:29)